viernes, marzo 25, 2011

Libia y Las N.U.


Las noticias sobre las revoluciones democráticas que ocurren en los países árabes del norte de Africa y en el Medio Oriente, nos llegan a todas luces sesgadas.
Las manifestaciones populares partieron en Egipto, donde la movilización de masas obligo a huir al Presidente vitalicio Moburak, que maniobró hasta el final para mantener sus privilegios faraónicos. Las manifestaciones siguieron en Túnez, Maruecos, Bahrain, Yemen, Jordania, Omán y también llegaron a Libia.
Es interesante lo ocurrido con Libia, país que ayer era amigo de Estados Unidos, de Francia, Italia, España, donde incluso fue recibido por el rey, hoy se convirtió en enemigo de todos ellos. Ayer era un demócrata que luchaba contra los terroristas, hoy se convirtió en un cruel dictador. El peor de todos los países árabes.
Quienes ayer hicieron grandes negocios con Libia, hoy quieren que Gaddafi deje el poder y apoyan a los insurgentes. Estados Unidos y la Unión Europea quieren apoderarse del petróleo que posee Libia, país que nacionalizó hace años su petróleo, ese es el verdadero motivo. A ellos no les interesa que el país vaya a una guerra civil.
Las informaciones dicen, le queda poco tiempo a Gaddafi, los alzados ocupan todas las ciudades del norte del país, avanzan hacia la capital, desertan importantes generales, aviones de guerra aterrizan en Yemen, Gaddafi bombardeó la ciudad ocupada por los rebeldes, etc. Gaddafi es igual a Bin Laden, es el mismo demonio.
Las potencias democráticas, la Liga Arabe, piden una zona de exclusión aérea, se trata de impedir que los aviones de Libia puedan volar en su propio territorio. En esta Liga participan países tan “democráticos” como Arabia Saudita que es una monarquía, e Irak, ocupada por los yanquis.
En Egipto los manifestantes se tomaron la plaza de la Libertad, primero cientos, luego miles y muchos fueron reprimidos y asesinados. Las manifestaciones se mantuvieron hasta que el dictador tuvo que irse.
Lo que llama la atención es que los manifestantes no tuvieron armas, nadie los apoyo desde afuera, era una gran fuerza pacifica.
En Sudan, Bahrein, Marruecos, Yemen, Egipto, Jordania, Omán, continúa la represión, los asesinatos de los opositores, las detenciones arbitrarias, las torturas. Antes estos hechos las grandes potencias no dicen una palabra, sólo Libia esta en el ojo del huracán.
Se dice que Siria y Argelia ayudan a Gaddafi, se puede ampliar el conflicto a otras zonas.
Lo único que garantizará el desarrollo libre de los pueblos, es la no intervención de parte de las grandes potencias en los asuntos internos de los diferentes países árabes. Esa sería realmente una gran ayuda para esos pueblos, necesitan ellos decidir que gobierno quieren.

No hay comentarios.:

La derecha y sus cuentos