Dos a la presidencia

¿Quién ganará las elecciones?


Esta es una pregunta de fácil respuesta, las grandes corporaciones exportadoras de materias primas, ganaran sea el que sea que llegue en Marzo a la Moneda.
Ni la Concertación, ni la Alianza piensan en la necesidad de cambiar el sistema, ellos, en diferentes medidas, están por continuar con el modelo neoliberal y hasta ahora lo han administrado en forma eficiente, para las corporaciones. Las ganancias que han logrado son gigantescas.
La cesantía, que es ya estructural se mantiene en más de 500.000 personas, la desigualdad social es una vergüenza, según la iglesia católica y muchos otros organismos sociales.
La pobreza, a pesar de lo que dice el gobierno, que esta disminuyendo, es mayor cada día, mientras más cesantía, mayor pobreza.
Claro que el gobierno mide la pobreza, con el mismo método que dejo la dictadura, la herencia de Pinochet se da por todos lados, por donde menos se piensa, allí esta presente el pasado.
Sobre los salarios, ninguno de los presidenciales que van a la segunda vuelta, se han referido a ello, no dicen en cuanto será el aumento. Así que se continuará, como hasta ahora, aumentando sólo el IPC.
Las demás son promesas, la pensión para la dueña de casa, el aumento de las pensiones asistenciales. ¿Por qué ahora salen a la palestra? Veamos como sea gobernado hasta hoy día. La Concertación y la Alianza, siempre se puesto de acuerdo para legislar, todas las leyes actuales llevan la impronta de estos consensos. Uno debiera hacerse la siguiente pregunta ¿Por qué no se ha legislado en todo esto años?
Vendrán las recriminaciones mutuas, que el gobierno no envío el proyecto, que la oposición no estaba de acuerdo. Etc. Etc.
Los ganadores serán los de siempre, el pueblo seguirá viviendo cada vez más, en mundo precario, sin un trabajo estable, trabajando horas a la semana. Trabajando en varios lugares, con salarios miserables, sin ninguna garantía.
La mayoría de los actuales trabajadores, cuando lleguen al final de si vida laboral, no recibirán pensiones o estas serán miserables.
Este es el futuro que ofrecen en realidad cualquiera de los dos candidatos, sea la señora Bachelet o el empresario Piñera

La segunda vuelta

Vamos a la segunda vuelta


Ha terminado la primera etapa, de la elección presidencial en Chile, con los resultados, más o menos previstos por politólogos y demás gurees, que hacen nata en este largo país.
Lavin, el representante de la dictadura fue derrotado en toda la línea, no sólo salio tercero, sino que al mismo tiempo, perdió la dirección de la Alianza, que ahora tiene un nuevo líder, el señor empresario Piñera, lo que no es poco decir.
Piñera trato por todos los medios de distanciarse de Pinochet, de alejarse de los elementos más comprometidos con la dictadura, según él, es humanista cristiano. Lucho con pasión para sacarse el lastre que lleva la derecha, los crímenes de la dictadura. Por esa posición sufrió los ataques, de los representantes de Pinochet, que muchas veces eran para hundir buques, le intervinieron el teléfono, lo bajaron de mala forma, como candidato a senador por Valparaíso e impusieron al Almirante Aranciabia. Pinochetista, que participo como dirigente de la dictadura.
Piñera, su tesis era sacarse la mochila, por lo demás pesada, de torturados, asesinados, desaparecidos, exiliados, su idea era que la derecha debía renovarse, sacudirse del lastre. En verdad en parte lo logro, pero nadie puede obtener una victoria limpia. Necesita los votos de los pinochetista, de tal manera que su nuevo comando, esta compuesto por algunos de ellos y eso todo el mundo lo sabe. El mismo Lavin es un hijo predilecto de Pinochet, escribió el libro “La revolución silenciosa” donde alabó sin medida la obra del golpista.
El general Villarroel, a nombre de los uniformados en retiró, le exige un compromiso con ellos, con la apariencia de pedidos gremiales, pero que en definitiva es lograr la amnistía, para los que participaron en crímenes de lesa humanidad.
El dicho popular dice “Dime con quién andas, y te diré quién eres”.
Por último, recuerdo cuando era joven, en las ferias y plazas, llegaban hombres, que vendía de todo, traían una gran culebra, que se la colgaban al cuello, eran los famosos charlatanes, que engañaban a la gente vendiéndoles ungüentos mágicos, que curaban todos los males. Cuando lo veo, en la TV, prometiendo que solucionará todos los problemas, los veo a ellos.