Van varios días desde ocurrido el terremoto que afectó a Bío Bío y Maule, lamentablemente aún no se soluciona los graves problemas de agua y luz, además miles de familias ya no tienen alimentación. Sólo ayer comenzó la entrega de ayuda en uno o dos lugares.
Se pueden dar miles de explicaciones, pero lo esencial es que las autoridades no han recurrido a las organizaciones de bases para entregar la ayuda. Los sindicatos, las Juntas Vecinales, los clubes deportivos de barrios, las diferentes iglesias, comités de viviendas, centros culturales, etc. Son organizaciones aunque con problemas, conocen a los pobladores y sus problemas. Ellas podrían apoyar a las autoridades.
En el comité de emergencia citado en la Moneda, estuvieron los ministros, las Fuerzas Armadas y empresarios. El Presidente de la CUT, la principal organización de trabajadores del país no fue invitada, tampoco La ANEF, ni profesores que son las mayores organizaciones de los trabajadores. A pesar de ser este grupo el que sufre con mayor fuerza las calamidades, y quienes terminaran pagando los grandes costos de este desastre.
Esto demuestra el carácter de exclusión a gran parte del pueblo chileno, de parte de la Concertación. Le temen al pueblo organizado y prefieren los métodos burocráticos, la represión y salvaguardar los intereses de grandes empresarios.
Es necesario acelerar la entrega de alimentos y agua a la población, de lo contrario los problemas como saqueos continuaran. Tenemos que ponernos en la posición de esas personas que desde el sábado no tienen agua y muchos tampoco alimentos. Sabemos que en tales circunstancias no todos actúan cuerdamente.
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