
Una nueva tragedia cayó sobre el pueblo chileno. Un terremoto grado 8,8, afectó gran parte del país, además un tsunami que barrio amplias costas del litoral.
El susto fue grande, aquí en Temuco fue grado 7 y su duración aún no se sabe, a mi me pareció larguísimo, eterno.
Hay cosas rescatables de esta tragedia, como la preocupación de los vecinos por la gente que vive en su vecindario. Los teléfonos no funcionaban sin embargo recibí varios llamados desde otras ciudades. La solidaridad en esta catástrofe ha revivido.
Temuco quedó sin luz ni agua, no funcionaban los celulares, una radio transmitía música bailable, cuando mucha gente nerviosa, trataba de saber de sus parientes repartidos en esta loca geografía algunos de vacaciones. Nadie sabía nada de nadie, el miedo, las replicas y los rumores, que nunca se sabe de donde surgen, agrandan la ansiedad y los temores.
En algunos lugares aún no hay agua y rara vez guardamos el vital elemento. Este ha sido el problema mayor donde existen niños. Lógicamente hay otros como falta de pan, al faltar el agua en panaderías. Así que la vida se va complicando.
Una vez más la naturaleza nos señala nuestra fragilidad como especie, pero somos prepotentes, no tomamos en cuenta la naturaleza y ocupamos lo que creemos nos pertenece. Sin embargo pagamos caro nuestra osadía, nuestra despreocupación por los demás.
La ministra de Vivienda dijo que no tiene información para señalar una cifra sobre la catástrofe, al no tener comunicación con los Seremis de las regiones. El gobierno tiene la obligación de disponer un sistema satelital o de radio.
En verdad en nuestra región no fue grave, como en Concepción y la región del Maule, donde hay casas y edificios en el suelo y la cantidad de fallecidos aumenta día a día. El tsunami arraso con todo en varios lugares, Dichato entre otros, el video de un aficionado es impresionante.
Tenemos dos Presidentes, una en ejercicio y otro recién electo. El señor Piñera, en lugar de ponerse al servicio de la Presidenta Bachelet, hace declaraciones, como si el actual gobierno no estuviera haciendo nada ante esta tremenda tragedia.
Se hizo una reunión de emergencia, para tomar las medidas necesarias para ir en ayuda de la gente, se invito a grandes empresarios, Jumbo y Lider. Como siempre se excluyó a los trabajadores, no se invito al Presidente de la CUT.
Pienso que los trabajadores tienen algo que decir, de cómo enfrentar este situación, no vaya a ser que además de soportar gran parte de la tragedia, tengan que pagarla mediante rebajas de salarios, más horas de trabajo por el mismo sueldo.
Se debe otorgar créditos blandos para que puedan reparar o reconstruir las viviendas, facilidades a los deudores habitacionales si sus casas o departamentos están dañados.
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