“Para mentir y comer pescado hay que tener mucho cuidado”, dice el refrán popular y la mayoría de la gente se atiene a este principio o al otro “la mentira tiene las piernas cortas.” Las personas no mienten por que sí, se cuidan mucho, saben que más temprano que tarde serán descubiertos.
Hay otros que se creen con el derecho a mentir y lo hacen sin ningún rubor. Lo peor es que creen que todos somos incautos y tontos. El Presidente de Colombia es descubierto en una mentira flagrante, en la famosa operación Jaque, donde rescató a los 15 rehenes. Utilizaron el logo de la Cruz Roja Internacional, lo que constituye un crimen de guerra. ¿Qué explicación dieron?
“El oficial que estaba en el helicóptero, se puso nervioso al ver que estaba rodeado de guerrilleros y entonces cogió un peto, que lamentablemente era de la Cruz Roja y se lo colocó”. ¡Vamos! Se supone que la operación fue perfectamente planeada, no fue casual entonces que estuviera allí el peto. La mentira fue grande, primero dijeron no haber utilizado los logos de la Cruz Roja. Cuando son sorprendidos, la explicación que dan es peor que la negativa misma. Es una burla a todo el mundo de parte del señor Uribe.
El candidato de la derecha de nuestro país, no encontró otro modelo mejor que imitar, que el desprestigiado sistema de Colombia para combatir la delincuencia. Según él el éxito de este modelo es innegable y debiéramos aplicarlo en nuestro país. En Colombia existe una cantidad de diputados investigados por sus nexos con los paramilitares y otros tantos por sus vínculos con los narco. Además durante este año se han asesinado a 25 dirigentes sindicales. ¿Es esto lo que quiere imitar?
El movimiento de los trabajadores, su capacidad organizativa y movilización, les preocupa a los empresarios como Piñera así que en el fondo lo que desea es aplicar las soluciones impuestas por Uribe, al movimiento de trabajadores.
Un modelo a imitar, no es tan baladí, como se pudiera creer. Sería un retroceso para todos los chilenos.
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