El Mundo al reves

El mundo al revés


Todos están preocupados de la eficacia en la producción, es el tema del día, sino se es capas de llevar adelante una gran producción, todo se vendrá abajo. Hay que ser eficaz, abaratar costos, ya sea utilizando tecnología de punta o bajando los salarios, lo que generalmente se hace recurriendo a variados artilugios, no pagando el seguro social, no pagando las horas extraordinarias, descontando por uno u otro concepto. Según se pregona para mejorar la producción, si un país no produce, no podrá competir, con los otros países. Como dice la letra de un antiguo tango “todo el mundo en el riel” todos contra todos.
El problema que jamás esta en primer plano y que debiera ser lo fundamental, si se produce para la sociedad o para los grandes consorcios, para la ganancia de los grandes monopolios, este es el dilema de hoy, o se organiza la sociedad para mejorar la calidad de vida de todos, o continuamos con el sistema actual, que además es un depredador que en pos de la ganancia esta destruyendo el planeta.
Lo principal esta oculto, las necesidades de la gente, trabajo, salud, educación, el tiempo libre. Los economistas del sistema y muchos que se autodenominan progresistas y también algunos revolucionarios, sólo ven lo que la ideología del sistema quiere que vean, la producción y no las necesidades de las masas y que es lo que falta para cubrir estas, cuales son las prioridades, que debe hacer la sociedad para disminuir el gigantesco abismo que hay entre unos pocos que tienen todo y la gran mayoría que no tiene nada.
Por ejemplo, si se necesitan tantos litros de leche para alimentar a los niños del mundo, la sociedad debería trabajar para cumplir con este compromiso y no, como hoy en día, en que la producción es para las ganancias de los grandes monopolios, no tiene como norte la satisfacción de las necesidades de toda la sociedad.
Se argumenta, que si las prioridades son sociales, el hombre no trabajara como corresponde y que sólo el sistema actual, en que la “competencia de todos contra todos” permite el progreso y el desarrollo de la sociedad, esta es una falacia, por que hoy día, unos mas que otros trabajamos para los monopolios. Los que están cesantes, permiten que los salarios de los trabajan sean inferiores, los que compran y los que no compran, o se ven obligados a comprar lo que los otros dan de baja, es una rueda gigantesca, que gira y gira aplastando, triturando, exprimiendo a la mayoría.