martes, mayo 22, 2018

Derrota imperial
Después de la derrota en las elecciones del 20 de mayo en Venezuela, que gano Maduro, el imperio volvió con fuerza a su antiguo plan de derrotar si o si a la revolución bolivariana. Sabia que iba hacer derrotada y con anticipación hablo de fraude, que no habían garantía necesarias. Las elecciones se hicieron tal como la pidió la oposición, estuvieron los representantes de las N.U. y otras organizaciones, además de personalidades sociales y políticas. La oposición pidió que se hiciera no en la fecha indicada por las autoridades electorales sino precisamente el 20 de mayo. El cronograma se cumplió tal que se firmo el acuerdo entre el gobierno y la oposición. Lo que creyó Falcón, que con todos los ataques económicos, con el bloqueo, con las privaciones que sometieron al pueblo, la cuestión era llegar y llevar, no midieron para nada el conciencia socialista y el natural rechazo a la injerencias extranjeras y en especial del imperio que desea apoderarse de las riquezas de Venezuela. No reconocer las elecciones, es el mandato de Trump que muchos gobernantes demócratas del continente lo hicieron suyo en forma inmediata, Temer no elegido por votación popular, Quiroga que remplaza al corrupto Kucsynki, Macri, que tiene una gran inflación, Peña Nieto, donde se asesinan a opositores y periodistas, Santos que no cumple el tratado de paz y que no da garantía que las elecciones sean solo un fraude, Piñera con su plan de quitar las garantías sociales conquistadas por los trabajadores chilenos y así los otros títeres del imperio en el continente. Ahora piden más sanciones, entorpecer el comercio de Venezuela, impedir que se desarrolle la producción nacional, bloquear con todo el país, hambrear al pueblo para que se rinda. Muchos países cortaran las relaciones con Venezuela, entre ellos Chile, la ofensiva yanqui no va solo contra la revoluciona bolivariana sino contra todas las fuerzas progresistas del continente, la unidad es lo único impedirá que esta ofensiva tenga éxito.

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