El Lider Las situaciones cambian como el viento. En ocasiones tan rápidas que muchos quedan descolgados, sin saber hacia donde marcha la micro. Con la caída de Golborne y la llegada de Pablo Longueira, hay un ciclo que la derecha debe revertir y para ello sacaron de su ministerio a Longueira el salvador, el unificador de su partido, defensor del gran gobierno de Piñera. Se trata de ver que es lo primordial: la defensa irrestricta de los intereses de los grandes empresarios, de mantener la Constitución pinochetista, hoy en peligro por la lucha de los movimientos sociales. La derecha sabe que la profundización de la democracia es su fin, que la participación de las masas es su perdición. Necesita la reagrupación de sus fuerzas para impedir perder escaños en la cámara de tal forma que el futuro gobierno, se vea obligado a consensuar cualquier ley, cualquiera medida que favorezca a la mayoría de la población. El candidato Longueira ataca a los comunistas, trata de poner cuñas entre las fuerzas progresistas, a la derecha no le gusta la diversidad ni distintas visiones sobre el futuro del país. Ataca a los movimiento sociales, diciendo que no tomará en cuenta la voz de la calle. Quieren continuar con el famoso sistema de los acuerdos de pasillos. Hablan de estabilidad, paz social, diálogo y consenso como la única manera de lograr el desarrollo del país, el progreso y llegar al primer mundo. Toda esta política es puesta en peligro por las protestas, movilizaciones que realizan “activistas políticos”. Ahora necesitan al hombre duro, que ayudó a organizar la juventud en apoyo de Pinochet en la noche de “Chacarillas” No será elegido, pero se abre camino tal vez para ser candidato en un próximo gobierno. El actual gobierno esta salpicado de diversos escándalos, la colusión de las farmacias, el perdonazo a Johnson, la poca capacidad en la reconstrucción, el abuso de Cencosud, el Censo que sería el mejor y resultó un fiasco. Lo más seguro es que pueden perder varias diputaciones. Si la oposición esta unida las podría obtener. Pero aquí tampoco las cosas están claras, los intereses particulares de los partidos, al no hacer primarias estas posibilidades están en duda. Hay en la oposición sectores que tampoco quieren los cambios, que no desean un gobierno de nuevo tipo, que quieren como en el “gatopardo” cambiar para que nada cambie. Sin embargo sabemos que las diferentes movilizaciones por los derechos de todos, será lo fundamental y hará que cambie este modelo pinochetista.