La corrupción

La corrupción

El país esta confundido, ante la campaña de unos y otros en contra de la corrupción, no esta quedando nada bueno, por fin el sistema muestra su esencia, que hay corrupción, esta claro que esta existe, no es un problema sólo de este gobierno, sino que ella viene de más lejos, de los tiempos del dictador y los dos sectores que luchan por estar en el poder, la concertación y la alianza la promueven, la han puesto en marcha en el país.
El sistema de dávidas, de prebendas, el asistencialismo dirigidos a los más pobres, ha corrompido amplios sectores populares, que en general no votan por un programa, por una idea de gobierno sino que por aquellos que llegan, antes de las elecciones con reparto de cosas, pelotas de fútbol, camisetas, comidas, soluciones de pequeñas cosas o de promesas que después no se cumplen.
Los dos bloques tienen en sus manos los medios de comunicación de masas y excluyen a los sectores democráticos y de izquierda, sólo ellos salen noche y día, en cada programa, sean estos serios o de farándula, allí están dando sus sesudas opiniones, descalificando a su contrincante. Si a alguien le ocurre una desgracia, llegan ofreciendo sus buenos servicios y ofreciendo soluciones, que generalmente la olvidan al momento de salir, como se dice por estos lados, en la foto.
No van ofrecer una alternativa, un programa, sino que se aprovechan de la pobreza para obtener votos, pobreza que han creado ellos mismos, con la aplicación a como de lugar del modelo neoliberal.
Ahora la llamada oposición rompe vestiduras, por los métodos que utilizan los que hoy día nos gobiernan, que son los mismos que ellos usaran con el dictador.
Creen que les llego la hora de volver al gobierno y dicen que el gobierno, no es legitimo, que ganaron con malas artes, como si ellos fueran castas palomas y no utilizan malas artes para conseguir sus objetivos. La carne de vaca y caballos, en grandes asados, que hacen antes de las elecciones en las cercanías de pueblos y ciudades, para sus electores, lo consideran normal.
Cuando el patrón les dice a sus trabajadores, un día antes de las elecciones, que si no sale su candidato, cerrara su empresa, su industria, no es corrupción, no es presión.
Los dos bandos que se disputan el gobierno, unos desde el poder político, los otros del poder económico, tienen montado un sistema que ha corrompido a la sociedad chilena, aunque algunos digan, para conformarnos, que somos los menos corruptos de América latina.
Se dictan leyes y nuevas normas para combatir la corrupción, pero lo más importante que es la participación del pueblo, única forma de parar este mal, no se ve por ningún lado, la gente sólo debe acatar, obedecer, la llamada clase política es la que debe resolver el problema, pero como el problema son ellos mismo, este continuara, hasta que la gente comprenda que su participación en las organizaciones sociales y políticas, para cambiar el sistema es la solución