¡No a la intervención!

Luis Almagro, fue elegido como presidente de la OEA, para dirigirla, representando a todos los países del continente, llego allí por pertenecer al Frente Amplio de Uruguay, al poco tiempo, al igual que Lenín Moreno su visión del mundo “cambio” y poco a poco se transformo en un suche del imperio y Venezuela se convirtió en su obsesión principal, en algo psicótico. En estos días dijo que la “intervención militar contra Venezuela no estaba descartada” la pregunta del millón ¿por quien? La OEA, Algunos países latinos o el imperio yanqui. A nombre de quién amenaza. Según el, por la situación de emigración de venezolanos a países fronterizos, donde se ha creado una crisis humanitaria. Venezuela atacada por todos los frentes, económicos, sociales, bloqueo tratando de hundirla en el caos y hacer el gobierno de Maduro culpable de todo. En esta guerra declarada contra de ella, se les mintió a los venezolanos, que salieran del país, que en el exterior iban a encontrar con la verdadera democracia, iban hacer recibidos con con todo lo que ofrecen los países libres y democráticos. “Comer pescado hay que hacerlo con mucho cuidado” como el golpe de Estado les fracaso, se inicio el hostigamiento de venezolanos, en Ecuador, Colombia, Brasil. Hubieron brotes racista. Les contaron el cuento, Colombia tiene el desplazamiento mas grande del continente y la pobreza es tremenda, no hay trabajo ni para los nacionales y menos para extranjeros indeseables. El ofrecimiento del mundo dorado no se cumplió, muchos quedaron como parias, sin trabajo, sin habitaciones, sin comida, al imperio el costo de vidas humanas para lograr sus objetivos no tienen importancia alguna. En México, en Jalisco la Fiscalía dejo abandonado un camón frigorífico, con 149 cadáveres, en Colombia se asesinan impunemente a dirigentes sociales, en Guatemala la persecución de los opositores es extrema. Estas cosas al malinche Almagro no le preocupan, no las toma en cuenta, su delirio es Venezuela. El pueblo bolivariano sabrá responder a estos ataques, el problema central, aunque hoy día los yanqui tienen bases militares en casi toda la región, es que se instale la guerra en el continente y nos transformemos en otro balcan u medio oriente, en que la muerte y la destrucción asolen a nuestros países. ¡No la intervención, por un continente de paz!