domingo, diciembre 11, 2016

La mentira como forma de dominación
La presión que se ejerce sobre todas las personas es realmente gigantesca, por diferentes medios ha logrado internarse en nuestra propia casa, además hay varios otros artilugios que nos mantienen ocupados en una realidad virtual, es como si las que conocemos personas vivieran en este mundo virtual, que solo así es posible mantener una relación, aunque ellas esten cerca, a lado de nuestro. Tenemos pues, la televisión y también el internet, nos llevan poco poco a este mundo virtual, que nos traslada del mundo real a uno imaginario donde los problemas reales no existen, donde a vida transcurre por otros canales. No hay problemas, como no tener dinero, como hay que pagar necesariamente la luz y el agua, cada vez más cada uno en su otro mundo. Las personas reales nos molestan, no distraen de nuestra preocupaciones virtuales. Como dije anteriormente no vamos a transformando hoy, nos transformamos ya en zombies. Los medios dicen por ejemplo, que el presidente Maduro de Venezuela es un dictador, como esto lo han repetido tantas veces, muchos terminan creyendo que es así, y si uno conversa, trata de explicar que esto es una falsedad, como esto esta establecido ya por la televisión, los diarios otro medio de comunicación, Maduro es un dictador no lo toman en cuenta. Además se dice en Venezuela hay un gran desabastecimiento, producto naturalmente de un mal gobierno que no permite desarrollo de "las personas" No tenemos una cultura de cuestionar, de pensar antes de creer todo lo que nos cuentan. Y si uno demuestra que lo que pasa en Venezuela se debe la intervención imperialista y lo que esta en juego allí es la propiedad sobre el petróleo, que hoy esta en manos del Estado bolivariano y los grandes consorcios pretenden quitarselo. Y por eso intervienen utilizando todos los medios, sabatajes, las calumnias, mercado negro, el bloqueo, tratando de desestabilizar a Venezuela. Así que toda la palabrería sobre, la libertad, la democracia, las elecciones son sólo eso palabras, que ellos jamás cumplen. La injerencia en los asuntos internos de terceros países es su actuación diaria, derribar gobiernos que no siguen las directivas del FMI y del BM es su meta.

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